Los monos tienden a ser tranquilos mientras no se les moleste, pero se pueden poner muy agresivos si te acercas mucho a una hembra cuando su macho está cerca, cuando no les das comida o les escondes cosas que ellos creen que es comida. Por eso, tenles respeto, no los molestes, cuidado cuando les des comida y evita ir con mochilas con muchas cosas dentro o accesorios “robables”, como gorros o lentes de sol.

Si te llegase a morder un mono (lo que ocurre comúnmente en este parque), primero fíjate si tienes sangre. Si no, probablemente no sea nada grave. Pero si la herida es más profunda, averigua con tu seguro de salud en qué centro atenderte o dirígete tú inmediatamente a un centro de salud para que te revisen. Es posible que necesites vacunas contra la rabia en ese caso.